Empleados de la Reserva de Altai Roman Vorobiev Y Tatiana Klimenko compartieron sus observaciones sobre la situación del hielo en el lago Teletskoye a principios de marzo.
Teletskoye no solo es uno de los lagos más profundos de Rusia, sino también el único de los embalses de agua dulce de Siberia, en el que prácticamente no hay congelación completa. La formación de la capa de hielo se prolonga hasta cuatro meses en algunas partes del lago. El último caso de cobertura de hielo en toda el área de agua del lago se registró en 2018.
Según el servicio de prensa de la reserva, el proceso de formación de hielo en el lago Teletskoye varía de un año a otro. La fecha promedio del inicio del congelamiento en la región de Yailu es el 28 de enero. La congelación más temprana de esta sección se registró el 29 de diciembre de 1966 y la última el 9 de marzo de 1939.
La estructura del hielo es diferente. Depende de la ubicación y de acercarse al borde. En algún lugar hay campos de hielo lisos con una red de grietas, en algún lugar hay un montón de fragmentos de forma irregular, hielo desmoronándose.
A mediados de febrero, gracias a varios días de calma y heladas, el hielo llegó a las aguas del pueblo de Yailyu. En ese momento, la capa de hielo se había formado en la bahía de Kamga (la desembocadura del río At-Kechu).
A principios de marzo, debido a los fuertes vientos que soplaban desde el sur (“Verkhovka”), el borde del hielo retrocedió más de 3 km desde el pueblo más allá del cabo Kobukhta hacia el noroeste. En la bahía de Kamnigsky, el hielo se rompió casi en una parte poco profunda.
La temperatura del agua en la superficie es de +0,7°С. En la columna de agua, se conserva una ligera pero notable estratificación de temperatura inversa: en una profundidad es más cálida que en la superficie, a 50 metros +1,2 °C. Fragmentos de témpanos de hielo arrojados a la orilla del Yailu ya tienen una estructura acicular. Esto indica su fragilidad y el proceso de destrucción en curso.
La reserva enfatizó que el lago Teletskoye una vez más confirmó el título de uno de los pocos embalses que no se congelan en el país. En marzo, las temperaturas diurnas adquieren cada vez más valores positivos, y la auténtica primavera llega a las reservadas costas.